Bolas Orgásmicas Fascinate...
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Las bolas chinas, o también llamadas Bolas Ben Wa o Bolas Geisha, suelen ser por lo general dos bolas bastante ligeras unidas por un lazo que se pueden introducir tanto por la vagina como por el ano.
Estas bolas, tienen en su interior otras bolas más pequeñas, creando un vacío en el interior. Mediante el movimiento las bolas interiores golpean con las exteriores y realizan una especie de efecto vibratorio, produciendo sensaciones muy eróticas y placenteras.
Estas bolas tiene dos tipos de uso:
Al margen del uso recreativo, las bolas chinas tienen una función de “pesa” que es un método muy eficaz para fortalecer la musculatura pélvica y en un futuro evitar incontinencias urinarias o el prolapso vaginal.
Expertos del sector de la sexología, ginecología y fisioterapeutas recomiendan su uso a mujeres que acaban de dar a luz con el fin de que la musculatura pélvica recupere su forma anterior al embarazo. También es recomendada para mujeres que sufren incontinencia urinaria leve y tengan un tono musculatura perineal aceptable.
Por otro lado, el ejercicio del músculo pélvico suele mejorar el tono de la vagina y, con ello, su salud, incrementando la sensibilidad de la zona y potenciando la sensación orgásmica. Además, mejoran la lubricación vaginal notablemente y es un efecto que se nota desde los primeros usos. Esto es debido a que las bolitas metálicas que contiene en su interior, golpean las paredes de la vagina con el movimiento, mejorando la circulación sanguínea de la zona y estimulándose de tal manera que mejora el nivel de lubricación.
Las bolas chinas se pueden usar en distintas ocasiones: antes de realizar el acto sexual, durante los juegos sexuales o fantasías. Es uno de los juguetes sexuales más famosos y más fantaseados.
No se puede negar que las bolas tienen beneficios para la vida y salud sexual. De hecho, para muchas llevar bolas chinas es algo muy erótico como si llevaras lencería sexy, y además fantaseando que nadie puede saber que lo llevas.
Por otro lado, las bolas chinas tienen una función mucho más directa y es que llevar las bolas estimula las paredes de la vagina, favoreciendo el flujo sanguíneo y mejorando notablemente los niveles de lubricación.
Además, las bolas te obligan a contraer y relajar el músculo, exactamente igual que cuando tienes un orgasmo. Y trabajar esto, significa que después los orgasmos serán más intensos y largos.